*-Hemeroteca 1980
Palomos Desconocidos
Sin considerarme el más idóneo para este articulo me voy a tomar el atrevimiento contando con el ánimo de algunos da mis amigos más aficionados que yo a esta especie de palomos, y creyéndome con los suficientes conocimientos para hacer esta definición del maravilloso y desconocido palomo llamado CELO, que tiene tanta aceptación aquí en Morón de la Frontera, que es el pueblo decano y creador de esta raza aunque sólo sea conocida en Sevilla y su provincia.
Tiene unas características propias e inconfundibles, primero por su plumaje aunque los hay blancos cola negra o porcelana algunos azul, ahumado prieto, negro o canelo, pero siempre con las alas blancas, el buche parte frontal también blanco formándole como una especie de medalla o medallón, que a muchos le corre hasta unirse con la panza y, a otros, le llega hasta la cabeza. Por este motivo los llamamos aliblancas, panza blanca, caretos, pechiblancos, etc.. cosa que los caracteriza enormemente.
Su tamaño en general es mediano, con una facilidad enorme de resistencia en vuelo. Su postura es elegante, la cola abierta en forma de abanico plana, buche también mediano formando una bola y elevándolo formándole una especie de morro o morrillo, el braceo más bien nervioso y al pararse suele tirar o pegar las alas a sus costados porque por normas, entra enpicado. El arrullo fuerte, con mucho brio, suele dar muchas vueltas cuando está seduciendo a la hembra, llega hasta ella incluso echándose encima.
Es muy insistente y por norma, no abandona la conquista fácilmente, de ahí le viene el nombre de CELO. Este palomo de cruce se hizo en los años cincuenta con los ejemplares que aquí teníamos y los que trajo don José Vazquez Miralles de Elche, donde reside actualmente y es natural, a quien tuve el honor de conocer en mi niñez. Aún en muchas ocasiones nos acordamos de él, porque como aficionado no va más y como persona puedo quedarme corto al catalogarlo de excelente. Posteriormente ha habido quien ha intentado asimilar este cruce yendo rotundamente al fracaso.
Tanto con esta raza de palomos como con la buchona antigua, aparte de exhibidas en exposiciones, también se pueden concursar en sueltas, siempre entre sus mismas especies, naturalmente, o bien colocación en vuelo y resistencia del mismo, el estilo de seducir a la hembra, etc. Claro que no podemos emplear el mismo sistema que con los palomos deportivos, que se transportan a otras localidades.
Estos palomos buchones de razas no por su fijeza a su palomar natal, pero si se puede hacer localmente y en vez de desplazar los palomos desplazariamos a los árbitros o jueces (todo es posible en Granada) y cada cual se puede divertir a su manera porque me atrevería a asegurar que muchos aficionados colombicultores de la actualidad desconocen la faena que puede realizar un macho buchón, por ejemplo puede estar emparejado con su hembra y mientras ésta se encuentra incubando, él está a la caza por si puede atraer otra o cualquier ejemplar extraviado, aunque admito que no es corriente en todos.
Ya son muestras de inteligencia y casta, ¿NO?.
M. Fernández / Morón-Sevilla – PD70/13 Abril 1980
*- VEAMOS UN VIDEO SOBRE EL BUCHÓN MORONCELO