Buchón Canario en pocas palabras

El Buchón Canario.

Nuestro palomo, en pocas palabras, se caracteriza, temperamentalmente por su alegría, tanto en vuelo como en tierra, por su arrogancia hacia la hembra, pero no por su agresividad hacia ella. Por su altanería en la competencia ante otros ejemplares machos, pero no por su belicosidad hacia ellos.

Morfológicamente por su tamaño y estructura, no es un ejemplar de lucha cuerpo a cuerpo, por el contrario sus armas son más subliminales, y su arte en el cortejo, lo define en su galantería para con la hembra, y su competencia en vuelo, dada por su gran resistencia, lo hace imbatible en el aire, poniendo ahí su gran baza de astucia para la conquista. La conjunción en positivo y supervisada de los cruces, para la obtención de esta línea de buchones, nos ha conducido a una raza, que cuando el aficionado la conoce no lo deja impertérrito, al contrario, tanto al aficionado novel como al erudito lo deriva al entusiasmo, a los primeros, por la alegría de su porte y a los segundos, porque le puedes hacer recordar y trasladar a momentos de su niñez o su juventud, donde existía la ilusión de encontrar esa raza de palomos que los sustrajera a materializar sus vanidades como criador, así le puede hacer recordar las características del viejo palomo valenciano, por altivez y presunción o a veces al hermoso palomo rafeño, por su estructura ósea y plumaje.

 

Pero probablemente lo que define, cataliza e intensifica sus características es la mixtura con la paloma bravía canaria (Columba Livia Canariensis), llamada coloquialmente paloma salvaje o paloma risquera. Esta subespecie de la paloma bravía, fue definida por BANNERMAN, en 1914, él la consideró como subespecie, ya que presentaba unas características muy peculiares que la hacían estar muy acondicionadas al hábitat canario, adaptada tanto a la orografía de nuestra tierra como a su clima, lo que determinó que le atribuyera unas características muy sui generis a esta paloma canaria, con la cual se comenzaron a realizar los cruces con otras razas peninsulares, hasta la consecución de lo que hoy conocemos como “Buchón Canario”, y cuyo estándar está muy bien definido actualmente.

Haciendo corolario de todo lo anterior, podemos concluir que nuestro palomo buchón es expresión por una parte de la idiosincrasia del criador canario, que le ha aportado su talante y su forma de ver la vida, y ésta a su vez, es congruencia de su entorno, tanto del clima como de su insularidad, y por otra, el aprovechamiento de una subespecie única en el mundo como lo es, la COLUMBA L.CANARIENSIS o paloma salvaje canaria.  / realfec

Saludos Palomer@s.

*- VEAMOS UN VIDEO SOBRE EL BUCHÓN CANARIO

 

Deja un comentario

Seguir

Únete a nuestros seguidores