Escampadissa, la paloma de los señores

Hablar de la paloma de escampadissa es hablar de mucho entes, es hablar de urbanidad y mediterraniedad. Urbanidad y mediterraniedad que convergen en Palma, Ciutat de Mallorca, ya que es en los tejados y cielos de esta ciudad donde mayoritariamente se pudo sentir el placer que causa la alta entropía y a la vez la magnanimidad de su vuelo que la hacen inconfundible. Pero siendo justos, cabe decir que no fue exclusivamente en esta donde se cultivó dicha raza, también hubo presencia de algunos “esbarts” en otras pequeñas ciudades o grandes pueblos tales como Llucmajor, Inca, Manacor, Felanitx, Maó, Ciutadella… Para aquellos que no conozcan el significado de la palabra “escampadissa” significa la dispersión de algo, ya que esta raza al volar no forma bando, puesto que cada individuo autónomamente va ascendiendo separado de los demás.

Por consiguiente, hablar de bandada o “esbart” en esta raza sería una antítesis. La palabra clave para entender el origen de dicha raza es la palabra comercio. Comercio entre el Oriente Medio y Europa. Así se debe entender que hablar de insularidad en el caso de Mallorca no es en absoluto hablar de aislamiento. Comercio que en los siglos XV, XVI y XVII halló una interfase ideal en las Islas Baleares.

Estamos en Mallorca y es 1450. Mallorca acaba de salir de una cruenta guerra civil: el levantamiento foráneo, en que el Sindicat Forà se alzó en armas contra las clases dirigentes de la ciudad y la oligarquía rural. Mallorca resurgió con dificultades de la depresión económica sufrida durante la Baja Edad Media. La recuperación económica y demográfica no se produciría hasta la segunda mitad del siglo XV. En aquella Mallorca una tercera parte de la población es extranjera y un 80% de ellos comerciantes. Comerciantes que enriquecieron, compraron escudos de armas y construyeron grandes palacetes, cosa que les permitió ennoblecer y relacionarse con las viejas familias de la nobleza mallorquina.

Pero que tiene que ver todo esto con las palomas?. Es posible que fuere el esplendor del comercio de ganado del siglo XVI el responsable de que llegara la paloma de escampadissa  y de otras razas. Tal y como cita el estudioso y criador Jaume Monserrat i Riera en su libro Els coloms mallorquins de pinta i d’esbart, es en los siglos XVI y XVII cuandó se dio un tráfico comercial marítimo muy importante tal y como escribieron Abul Fazl (1590), en la India, J .Cortès (1613), y Francis Willughby(1676), en Inglaterra.

 

Fueron entonces los nobles y los comerciantes enriquecidos los primeros que construyeron grandes palomares y cultivaron esta raza, la cual se convirtió en un símbolo de poder. Los grandes bandos o esbarts criados en los palomares de Ciutat representaron un motivo de honor y ostentación hasta bien entrado el siglo XX.

Cuanto mayor era el número de aves que formaban parte de la plantilla del palomar mayor era el honor y dignidad de las familias más pudientes de la ciudad. Por consiguiente, el colom d’escampadissa a menudo era referido como “es colom dels senyors”. Algunos ejemplos son la Familia Despuig, el palomar que hi había en el Casal Balaguer o el de Ca’n Vives Oneill, Ca’n Barceló. Concretamente sabemos que el palomar situado en Ca’l marquès del Reguer o Ca’n Balaguer, el músico Josep Balaguer i Vallès que era gran aficionado a esta raza como otros miembros de la familia Balaguer, hizo colocar un ascensor para subir al palomar el cual era conocido popularmente como “sa gàbia blava”.

Extrac.-* a-e /Por Lluc Ballester i Martorell

 

Caracteres generales:

Es un palomo de tamaño mediano, de aspecto alargado debido a su plumaje, especialmente el de las alas y la cola.

La posición del cuerpo es horizontal.

El plumaje es abundante y un poco mullido.

Es un animal de temperamento nervioso e inquieto, con un tipo de vuelo muy especial que le ha dado nombre a la raza, porque al iniciar el vuelo se van elevando todos juntos dando vueltas en forma de pequeños círculos, hasta alcanzar una altura considerable. A partir de aquí y de forma súbita, el grupo se esparce en todas direcciones y cada animal retorna a su aire al palomar bajando poco a poco. Su peso oscila entre 320 y 350 gramos, su longitud desde la punta del pico hasta el extremo distal de la cola es de 33 cm. y su envergadura entre las puntas de las alas extendidas es aproximadamente de unos 72 cm. 72 cm.

-*GOIB

 

 

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